La normativa para puertas cortafuegos garantiza la seguridad en cualquier edificio: sin ella, un incendio podría propagarse sin control. ¿Cómo compatibilizar estos requisitos con proyectos arquitectónicos que buscan espacios limpios y minimalistas, sin marcos visibles?
La innovación demuestra que es posible unir diseño y protección, con puertas que se integran en ambientes contemporáneos manteniendo la certificación.
En este artículo descubrirás qué significa la clasificación EI60 C5, cómo se realizan los ensayos, la documentación y en dónde se instalan.
Qué significa la clasificación EI60 C5 en una puerta cortafuegos
A primera vista, la clasificación EI60 C5 parece una fórmula o un código difícil de entender, pero en realidad es una descripción del comportamiento de una puerta frente al fuego y al uso cotidiano. Dicho de otra forma, cada letra y número tiene un significado concreto que define el nivel de protección y resistencia del producto:
- E (Estanqueidad o integridad): indica que la puerta impide el paso de llamas y gases inflamables durante el tiempo certificado.
- I (Aislamiento térmico): asegura que el calor no se transmita a la cara no expuesta, protegiendo a las personas y al mobiliario cercano.
- 60 (Tiempo de resistencia): significa que la puerta mantiene estas prestaciones durante al menos 60 minutos completos, un margen crítico para la evacuación y la intervención de bomberos.
- C5 (Durabilidad de uso): es la categoría más alta en ciclos de apertura y cierre: más de 200.000 usos sin pérdida de prestaciones.
En la práctica, una puerta EI60 C5 detiene el fuego y el calor durante una hora, y, además, resiste el desgaste diario de mucho paso, como hoteles, hospitales o edificios de oficinas.
En Sensem fabricamos puertas que cumplen con esta clasificación. Esto demuestra que creamos diseños capaces de resistir condiciones extremas y, a su vez, se integran de forma elegante en proyectos de arquitectura contemporánea. Nuestras puertas superan estos ensayos que confirman su alta calidad y seguridad.
Ensayos según UNE EN 1634-1 realizados en laboratorios
La resistencia al fuego de una puerta se mide realizando ensayos en laboratorios. La norma UNE EN 1634-1 es la referencia europea. Establece cómo deben probarse las puertas para comprobar su integridad, aislamiento y comportamiento frente al humo.
El procedimiento es muy estricto. La puerta se instala en un horno de ensayo y se expone a un fuego controlado. Mientras las llamas alcanzan temperaturas extremas, se miden los siguientes aspectos:
- Si las llamas o gases atraviesan la puerta.
- Si la temperatura en la cara no expuesta sube por encima de lo permitido.
- Si la estructura y el mecanismo de apertura siguen funcionando después de ciclos de uso repetidos.
Estas pruebas certifican que cada puerta supera los requisitos de resistencia al fuego y control de humo. Sirve para comprobar su funcionamiento en situaciones críticas.
Compatibilidad del diseño sin marcos con la normativa
El diseño sin marcos plantea un reto añadido frente a los modelos tradicionales, ya que elimina elementos que suelen aportar rigidez estructural. Sin embargo, la normativa no establece cómo debe ser su estética, sino que exige que cumpla con los criterios de resistencia al fuego, integridad y aislamiento definidos en los ensayos oficiales.
En este sentido, una puerta sin marco puede ser perfectamente válida siempre que supere las pruebas de la norma UNE EN 1634-1 y disponga de su correspondiente informe de clasificación EI60 C5.
Lo importante no es la apariencia, sino que el conjunto (hoja, herrajes, juntas y sistema de instalación) mantenga las prestaciones exigidas durante el tiempo de resistencia al fuego certificado.
Las puertas cortafuegos sin marcos aportan un valor estético diferencial y, al mismo tiempo, cumplen con la ley, ofreciendo seguridad certificada en cualquier proyecto.
Nuestra experiencia demuestra que es posible aunar ambos objetivos: lograr un diseño minimalista y cumplir con todos los requisitos legales. Por eso, las puertas cortafuegos sin marcos son seguras y compatibles con el diseño contemporáneo.
Dónde se instalan las puertas cortafuegos EI60 sin marcos
La normativa recoge dónde deben instalarse puertas cortafuegos EI60. Esta exigencia busca respaldar la compartimentación del fuego y asegurar una evacuación rápida y segura.
Estas son las zonas donde su instalación es obligatoria:
Hoteles y edificios públicos
En pasillos, accesos a salones de actos o zonas comunes. Al tratarse de lugares con gran afluencia de personas, posibilitan que, en caso de incendio, los espacios se dividan y los ocupantes cuenten con vías seguras de evacuación.
Hospitales y centros de salud
En este tipo de edificios la seguridad es prioritaria. Las puertas cortafuegos se instalan en pasillos, zonas de hospitalización y accesos a áreas técnicas. Se trata de una exigencia que responde a protocolos muy estrictos.
Aquí, cada minuto cuenta, y la resistencia al fuego debe ir acompañada de un uso intensivo sin pérdida de prestaciones.
Viviendas y oficinas de alto nivel
En complejos residenciales y edificios corporativos, estas puertas se ponen en accesos a garajes, trasteros, salas técnicas o zonas comunes.
En oficinas, son imprescindibles en salas de instalaciones o espacios destinados a archivo, donde la protección contra incendios debe estar garantizada.
Zonas de escaleras y salidas de emergencia
La normativa indica que deben instalarse en accesos a escaleras, salidas hacia la vía pública y pasillos de evacuación.
Su colocación protege las vías de escape y proporciona su uso seguro en caso de incendio.
Documentación que debe entregar el fabricante
Deben ir acompañadas de una serie de documentos que acrediten su resistencia. Esta información sirve para demostrar que cumplen con la legislación vigente.
La documentación es la siguiente:
- Informe de clasificación conforme a la legislación, que muestra cómo se comporta la puerta frente al fuego según los ensayos realizados.
- Manuales de instalación y mantenimiento, que explican cómo colocar y conservar la puerta.
- Declaraciones técnicas, que muestran que cumple con la ley y puede ser revisado en inspecciones oficiales.
Toda esta documentación confirma que actúa según lo previsto en caso de incendio. Igualmente, facilita las inspecciones oficiales.
Mantenimiento y renovación de certificados
El mantenimiento de una puerta cortafuegos es esencial para que conserve su grado de seguridad a lo largo del tiempo. El uso diario, la exposición a la humedad, el polvo o la temperatura pueden afectar a las bisagras, cierres, juntas y herrajes. Por eso, la ley exige revisiones periódicas y, en ciertos casos, la renovación de los certificados de resistencia al fuego.
Estas revisiones verifican que sigue cumpliendo con los estándares establecidos, asegurando que las zonas de evacuación estén protegidas y que el funcionamiento sea seguro. Además, se detectan desgastes o daños que deben ser reparados antes de que se produzca un fallo en una situación de emergencia.
Es importante tener los certificados actualizados, las inspecciones al día y cumplir con la legislación vigente para contar con una total seguridad.
Por qué elegir puertas cortafuegos Sensem
Las puertas cortafuegos sin marcos están diseñadas para frenar la propagación de incendios y facilitar la evacuación en hoteles, centros comerciales y otros edificios.
En Sensem usamos para su fabricación materiales de alta calidad y han superado los ensayos en laboratorios, de acuerdo con los requisitos oficiales.
Su diseño elegante y moderno encaja perfectamente en proyectos contemporáneos sin comprometer ninguno de los aspectos mencionados anteriormente.
¿Buscas una puerta cortafuegos sin marcos que combine seguridad y diseño? En Sensem te asesoramos para elegir la opción más adecuada según la normativa para puertas cortafuegos.


